SOBRE NOSOTROS
Nuestro compromiso con la sombrería artesanal: unir diseño y desarrollo sostenible
Creemos en los sueños a lo grande. Por eso, nuestra marca tiene un sueño que es su compromiso con el planeta entero.
Nuestros sombreros son insignia de diseño y de sostenibilidad.
En Falcinelli Sombrerería, el proceso creativo y de producción es totalmente artesanal.
Hemos recuperado y dinamizado las antiguas técnicas de sombrerería para integrarlas completamente en nuestro proceso de producción. Cada pieza de nuestras colecciones o realizada a medida, está confeccionada a mano. Queremos que estas técnicas que hacen parte de nuestra cultura nunca desaparezcan.. Y cada día trabajamos por ello.
Amamos el fieltro, un material natural, duradero, que no crea residuos o desperdicios, ni al momento de su fabricación ni en el momento de la elaboración del sombrero. Utilizamos para nuestros sombreros artesanales el fieltro de pelo: el más resistente y duradero, además de ser impermeable de forma natural. Para cada sombrero se utiliza una campana de fieltro, por eso, nunca hay residuos. Tu sombrero es amigo de nuestro planeta, y si lo cuidas, te acompañará muchos años.. Y tus hijos podrán usarlo también!
Los seres humanos son únicos. Por eso tu sombrero también puede serlo.
Nos encanta guiar a nuestros clientes hasta descubrir una forma distinta de comprar.
Sobre tus sombreros artesanales
Para mí, realizar un sombrero es como realizar una pequeña escultura.
En el origen de nuestras piezas artesanales siempre está un boceto, una fotografía, o un recuerdo, la escena de una película. Cuando preparo una nueva colección, intento empaparme de esa atmósfera que quiero recrear, buscando inspiración en libros, volviendo a dibujar una y otra vez esas formas, viendo películas, inventando personajes.
Cuando el estilo del sombrero ha cogido forma, los protagonistas son los materiales y las técnicas: para los modelos de invierno uso fieltro de pelo de conejo o de castor, un material cálido, compacto, resistente, impermeable
de forma natural, y que puede tener muchas vidas. Por qué mis sombreros pueden durar años, y luego siempre se pueden volver a planchar con otra forma o medida y tener una vida totalmente distinta.
En verano los finísimos parasisal, y la paja toquilla son mis materia- les preferidos, para realizar creaciones ligeras y llenas de luz. El tono natural de estas fibras es un clásico de la elegancia.
Para la realización de mis sombreros utilizo solo técnicas artesanales. Me emociona pensar que con estas mismas técnicas e instrumentos se han realizado sombreros de leyenda en los últimos 200 años.
Historia y influencias de Falcinelli Sombrerería
Mi sueño de dedicarme a la sombrerería viene desde muy lejos. Desde pequeña, me fascinaba el diseño, pero sobre todo, las diferentes texturas que podía usar para crear objetos de formas y colores que pudieran transmitir emociones.
Crecida entre las dulces colinas de Umbría, en Italia, me mudé a Roma para completar mis estudios de moda y diseño en la Accademia di Costume e di Moda.
Allí pude respirar y empaparme de diseño, moda, colores, tendencias, excentricidad. En una palabra, de Arte. Pero también tuve la suerte de poder conocer desde cerca el trabajo en las sastrerías teatrales, estudiando el diseño y la realización de vestuario en los talleres más antiguos de la Ciudad Eterna. Allí, aquel universo de formas, texturas, sensaciones, cobraba vida en magnificas capas susurrantes, inmensas y ligerísimas alas, delicados plisados, teñidos a mano y secándose al sol.
En cada creación de Falcinelli Sombrerería está encerrado este universo en miniatura, donde las sensaciones y las antiguas técnicas de sombrerería se entrelazan y se unen.
Mi viaje sigue y me lleva hasta Madrid, donde crecen mis experiencias en el mundo del vestuario teatral.
En este mundo de ficción y pura realidad, dietro le quinte, entre bambalinas, se empieza a formar mi proyecto, de llevar a la calle esas pequeñas obras de artes que pueden ser los sombreros de teatro.
El sombrero es un concentrado de estilo, que puede reflejar una época, un personaje, un mundo.
Así empiezan los primeros diseños de Falcinelli Sombrerería, piezas contemporáneas, con inspiración en el mundo del teatro, del cine, de la historia del arte italiana. Seguimos realizando nuestros sombreros a mano, uno a uno en nuestro taller en Madrid. Trabajamos usando antiguas técnicas de sombrerería y los mejores materiales, para realizar diseños únicos.
La tienda
Hace casi diez años, empezaba a construir mi sueño de poder vender mis sombreros. Como en todos los cuentos, hay héroes, castillos, y algo de magia. En este cuento, hay un héroe, sin el cual nada sería posible en mi caótico universo. La primera idea de abrir una tienda toda mía, donde poder acoger al cliente, aconsejarle, hacerle descubrir este maravilloso mundo de la sombrerería, en realidad no fue mía.
José Miguel Pérez Sierra, mi marido, fue el primero que me hizo ver las posibilidades que podía tener un pequeño local donde presentar mis modelos. La idea, en principio, en plena crisis en 2013 me parecía una auténtica locura. Pero a veces, las mejores cosas pasan después de haber cometido alguna locura. Fuee así que empezamos a imaginar este espacio que ahora es Falcinelli Sombrerería.
En el corazón del barrio Salamanca, hemos creado este castillo encantado del sombrero. Un lugar que transmite al cliente que entra la pasión para este maravilloso trabajo y dónde puedo enseñar muchos modelos y estilos diferentes para crear algo único y realmente personal.
Es muy importante que el cliente que nos visite pueda llevarse no solamente un sombrero, sino su sombrero perfecto: por eso, dedico al asesoramiento de nuestros clientes todo el tiempo necesario. Escoger entre varios materiales, y luego dar forma a todos los detalles de tu sombrero, es una experiencia única, llena de posibilidades. Me encanta hablar con los clientes de los diferentes materiales, contarles su origen y su mejor formas de trabajarlos.